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23/11/2023
Las anfetaminas son un grupo grande de sustancias psicoactivas obtenidas de forma sintética. Por su composición química tienen semejanzas con adrenalina, pero a diferencia de ella pasan por la barrera sanguínea cerebral, causando adicción.
Estas sustancias son conocidas como un polvo blanco cristalino, aunque en el mercado raras veces se encuentran en estado puro. Normalmente se mezclan con cafeína, aspirina, azúcar, incluso harina. Se venden en forma de polvo, pastillas, cápsulas de distintas formas, tamaños y colores, pero también en forma de solución en ampollas. Se conocen como “speed”, “fast”, “elevadores”, “uppers”, “louee”, “whiz”.
Dado que en los últimos años las drogas sintéticas tienen un uso cada vez mayor, las anfetaminas lentamente empiezan a ocupar el lugar de los narcóticos naturales. Su popularidad es confirmada por las estadísticas, según las cuales alrededor de 34 millones de personas al menos una vez en la vida ha probado las anfetaminas, es decir el número supera el de la cocaína y heroína juntas. Su gran extensión es acompañada por un mercado amplio, es decir, anualmente se produce más de 400 toneladas de esta sustancia.
Teniendo en cuenta la gravedad de la situación en el mundo, el hospital privado para el tratamiento de las adicciones, Dr Vorobjev desea presentarles las consecuencias que tiene el consumo de anfetaminas.
Las anfetaminas son descubiertas en el siglo XIX
Las anfetaminas han sido descubiertas gracias a Lazăr Edeleanu. Este químico rumano hizo la primera síntesis en 1887 en Alemania, denominando la sustancia obtenida fenilisopropilamina.
Sin embargo, su efecto se quedó desconocido hasta 1927, cuando Gordon Alles hizo una síntesis nueva mediante la cual probó su propiedad simpaticomimética. Unos seis años después, las anfetaminas, gracias a Smith, Kline y French, fueron introducidas en la medicina. Se vendían bajo el nombre de “Benzedrine”, como inhalador para resfriado y estornudos, pero también como un medicamento para los asmáticos.
Muy pronto encontraron su uso en el tratamiento de distintos estados, incluyendo narcolepsia, obesidad, hipotensión, libido bajo y dolor crónico. Han mostrado efecto positivo en el tratamiento de los niños hiperactivos, así que durante años formaban la terapia básica para mantener la concentración.
Durante la Segunda guerra mundial, las anfetaminas se daban a los militares británicos, alemanes y japoneses para aumentar su fuerza y persistencia, mientras que también las utilizaban los líderes, como Hitler y Churchill. El uso con fines militares continuó durante la guerra en Vietnam y Corea.
En los años 70 fueron descubiertos los verdaderos efectos de las anfetaminas, así que los gobiernos alrededor del mundo iniciaron un control riguroso del que se consideraba medicamento hasta entonces. Lamentablemente, el consumo no ha disminuido, porque entonces empezó el florecimiento de su producción ilegal.
¿Cómo producen efecto las anfetaminas?
Las anfetaminas se usan con mayor frecuencia por vía oral o esnifando, con menos frecuencia fumando o por vía intravenosa. El efecto se produce entre 15 y 30 minutos después de consumo, y suele durar entre 4 y 6 horas.
Igual que la cocaína, esta sustancia psicoactiva produce euforia inicial, buen humor y agudizamiento de los sentidos. Se produce una ola de energía, así que los esfuerzos físicos son más fáciles, mientras que también se percibe la hiperactividad sexual.
Con el tiempo, al aumentar las dosis, se intensifican los efectos, así que una persona se hace más excitada, habla más y desarrolla una falsa sensación de superpoder. No está excluido que este tipo de comportamiento produzca la agresividad.
¿Cuáles son las consecuencias del consumo de anfetaminas?
Con el tiempo las anfetaminas producen tolerancia, así que uno necesita aumentar las dosis para sentir el placer inicial.
El consumo a largo plazo produce una pérdida de peso peligrosa y desnutrición. Luego ocurren trastornos de sueño y cambios de humor. La pérdida de control muscular produce calambres musculares y tics, mientras que los problemas cardiovasculares e hipotensión aumentan el riesgo de infarto y golpe cerebral. Estos síntomas son seguidos por la depresión y la ansiedad.
Las anfetaminas tienen fuerte efecto en el sistema nervioso central. Se ha probado que afectan la muerte prematura de gran número de estaciones cerebrales, cuyas consecuencias son caída de concentración y funciones cognitivas. Es especialmente peligrosa la psicosis anfetamínica. Se trata de un trastorno mental similar a la esquizofrenia paranoide. Se manifiesta por alucinaciones visuales, auditivas o táctiles y paranoia, mientras que tampoco es raro que se presente un comportamiento violento.
La adicción a las anfetaminas requiere tratamiento hospitalario. En la clínica Dr Vorobjev se llevan a cabo los métodos contemporáneos del tratamiento de los trastornos adictivos. Éstos empiezan por un diagnóstico detallado del estado físico y psicológico del paciente, así como del grado de adicción. Solo después de haya sido realizada una evaluación detallada, se prescribe el mejor programa, que incluye una desintoxicación completamente indolora y el tratamiento rápido y máximamente eficaz de la dependencia psicológica, así que los pacientes en un plazo breve regresan a la vida cotidiana, sin peligro de recaídas. El apoyo después del tratamiento ofrece garantía adicional de la preservación de los resultados obtenidos.
Al aplicar los tratamientos únicos y más modernos, así como por el esfuerzo de los médicos y psicoterapeutas de renombre mundial en la clínica Dr Vorobjev todas las adicciones son vencibles.
Publicado el 23/11/2023
Por el equipo de Dr Dorobjev Clinic
